Por Juan Monserrat Castillo
Ciudad de México.– La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) habría decidido, por una cerrada votación de cinco votos a favor y cuatro en contra, revisar el amparo promovido por el exgobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, en un giro que sacude las estructuras del Partido Acción Nacional y reabre uno de los expedientes más incómodos del sexenio pasado.
De acuerdo con filtraciones atribuidas a la Fiscalía General de la República (FGR), el caso retoma fuerza con nuevas líneas de investigación sobre presuntas irregularidades financieras y posibles actos de corrupción, que incluirían el favorecimiento a empresas vinculadas con el exmandatario y una fortuna personal que habría superado los 105 millones de pesos durante su gestión al frente de Tamaulipas.
El expediente “54/2024” será revisado por la Corte para determinar si existen elementos que ameriten una orden de aprehensión contra el exgobernador panista, actualmente señalado en diversos procesos judiciales.
La decisión, más allá de lo jurídico, tiene lectura política: abre un nuevo frente de presión para el PAN en momentos en que el partido busca reconfigurarse tras la derrota electoral y definir su papel frente al gobierno federal. En el tablero de la sucesión presidencial y la disputa interna por el liderazgo opositor, el nombre de Cabeza de Vaca vuelve a ser una pieza incómoda.
Con este movimiento, la Corte no solo revisa un expediente, sino resucita los fantasmas del poder azul, aquellos que en su momento hicieron de Tamaulipas un bastión panista y hoy podrían convertirse en símbolo de su desgaste nacional.